La infraestructura de virtualización es uno de los aspectos más importantes de la red corporativa. Todos parecen tener el conocimiento, y muchas veces se deja de lado lo más obvio.
La virtualización hace que los recursos virtuales puedan ser usados de la misma manera como cualquier recurso físico o aplicación. Los servidores, redes, escritorios remotos (desktops), aplicaciones y almacenamiento pueden ser completamente virtuales.
Actualmente, la virtualización es integral para la infraestructura de los desktops y centros de procesamiento de datos, tiene una gran diversidad de ventajas, empezando con la flexibilidad y facilidad de implementación.
La virtualización continúa en constante evolución, la habilidad de monitorear y gestionar una gran cantidad de máquinas virtuales no se ha desarrollado del todo.
Beneficios:
Una infraestructura virtual puede lograr que tecnología a nivel empresarial sea accesible a las organizaciones que carecen de espacio para hardware y licencias de software o para mantenimiento continuo a los centros de datos. El poder maximizar el uso de recursos es flexible y permite que la carga hacia los servidores sea mucho menos pesada.
En cuanto a los recursos físicos son minimizados, también se reducen los espacios físicos los cuales indican un mantenimiento más sencillo, con impactos menores y un bajo consumo de energía.
En general, la virtualización acelera el despliegue, la configuración, y el mantenimiento de ambos servidores y terminales, haciendo la vida mucho más fácil a los encargados de TI.
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